El mural de azulejos de Almería, en la Plaza de España de Sevilla, representa la capitulación de Almería ante los Reyes Católicos en el año 1489.
El primer intento de conquista fue en junio de 1488 cuando capituló Vera, se entregaron las Cuevas, Mojácar y también capitularon los Vélez, al igual que se entregaron la zona del río Almanzora, Sierra de los Filabres y posteriormente Nijar.
El ejercito castellano se acercó a Almería también esperanzados en la entrega de la ciudad. Sería Yahía Al-Nayar , quien había ayudado a la entrega de los lugares del Almanzora y tenía convenida la entrega de la ciudad de Almería a cambio de importantes donaciones. La estrategia era simular un cerco por tierra y un bloqueo marítimo, como se había hecho en Málaga y de esta forma la capitulación de Almería estaba asegurada. Pero esta traición fue descubierta por El-Zagal y Yahía Al Nayar fue sustituido. A partir de este momento el equipamiento militar se reforzaría y el nuevo alcalde cerraría las puertas de la ciudad para evitar por todos los medios entregarla. De este modo, las tropas castellanas optaron por retirarse.
Ante la resistencia de Almería, Fernando el Católico cambió los planteamientos estratégicos para el año siguiente, pensando cercar Baza, situada en un magnífico cruce de caminos como eran Murcia, Guadix, Almería y Granada. Cuando Baza capituló el 4 de diciembre de 1489, se pactó al mismo tiempo la entrega de Almería y Guadix.
Escudo de Almería
En campo de plata, una cruz latina de gules (rojo); bordura componada de quince compones: tres de gules, con un castillo, de oro (amarillo o dorado), almenado de tres almenas, mamposteado de sable (negro) y aclarado de gules; en tres de plata, un león rampante, de púrpura (con frecuencia de gules), linguado, uñado, armado de gules y coronado de oro; tres de oro, con cuatro palos, de gules; en tres de oro (en ocasiones de plata), un águila de sable, picada y membrada del mismo esmalte (color); y en tres de plata, una granada al natural, rajada de gules, tallada y hojada de dos hojas de sinople (verde).
El todo, rodeado de una cinta cargada con el lema «MUY NOBLE, MUY LEAL Y DECIDIDA POR LA LIBERTAD, CIUDAD DE ALMERÍA» escrito en letras de sable.
Al timbre, Corona Real cerrada, que es un círculo de oro, engastado de piedras preciosas, compuesta de ocho florones de hojas de acanto, visible cinco, interpoladas de perlas y de cuyas hojas salen sendas diademas sumadas de perlas, que convergen en el mundo de azur o azul, con el semimeridiano y el ecuador en oro, sumado de cruz de oro. La corona forrada de gules o rojo.
Los elementos del escudo aluden a la toma de la ciudad en el año 1147 por el rey Alfonso VII de Castilla con ayuda de genoveses, pisanos, el conde Ramón Berenguer IV de Barcelona y el rey García Ramírez IV de Navarra y Álava.
La cruz de gules sobre un campo de plata se adoptó del escudo de Génova y es conocida como la Cruz de San Jorge. Esta cruz es empleada en otros símbolos como la bandera de Inglaterra el escudo de Barcelona o la propia bandera de la ciudad de Almería. La bordura recoge las armas reales de Castilla y de León, la Señal Real de Aragón (los cuatro palos de gules sobre campo de oro que es Aragón ) y el blasón antiguo del Reino de Navarra (el águila de sable sobre campo de oro), usado hasta 1212. Estos elementos se unen al blasón del Reino de Granada.